Ayer, en los ambientes de la sede del Poder Judicial de Cajamarca se dio lectura a la sentencia en contra de Fernando Chuquilín Ramos, actual presidente del grupo “Comité de rondas urbanas de Cajamarca”.
La pena para Chuquilín es de doce meses de pena privativa de la libertad – suspendida; y al pago de una reparación civil en forma solidaria de 2 mil soles.
Junto con Chuquilín Ramos fueron condenados justo Vargas Sánchez (quien ya dejó de pertenecer a dicha organización) y el empresario Castillo Morales.
El magistrado a cargo de este caso estableció que los tres sentenciados tuvieron responsabilidad en el delito de coacción en contra de una menor de edad, identificada como “M.A.R”, quien el año 2015 fue retenida por la organización de ronderos urbanos, acusada por el empresario de haberle robado 4 mil soles.
La menor fue retenida, golpeada y obligada a declarase culpable de las acusaciones en su contra. Por miedo a recibir más castigo aceptó la responsabilidad de un robo, que no demostrado.
La menor de edad junto con su madre, asentaron la denuncia en la Segunda Comisaría de Cajamarca, y empezó el proceso de investigación a cargo de los fiscales del Ministerio Público, que establecieron responsabilidad de los tres imputados.
La Fiscalía estableció un delito de secuestro, por el cual la pena no sería menor de 35 años; pero los jueces resolvieron el caso como coacción, y la pena fue de un año de prisión suspendida, y el establecimiento de una serie de normas de conducta que deberán cumplir.
La lectura de sentencia se realizó en la sede del Poder judicial en el complejo Qhapac Ñan; hasta donde acudieron simpatizantes e integrantes de la organización Rondas Urbanas, pidiendo que los jueces liberen de culpa a Chuquilín Ramos, quien no estuvo en la lectura de sentencia, por estar delicado de salud.
El Mercurio
esta persona esta fuera de toda ley, viola los derechos humanos y su sentencia es de risa para este delincuente.
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