Víctor Fuentes, economista del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), dijo que el Gobierno debería aprovechar los altos precios internacionales de los minerales para impulsar las inversiones mineras en el Perú y enfrentar la crisis económica mundial. Explicó que la cartera en el año 2021 es de más de mil millones de dólares, los cuales podrían generar más recursos fiscales y empleos en el país.
“Las políticas del Gobierno son pocas promotoras de la inversión privada. Con estos niveles de los precios de los minerales en el mundo deberíamos estar generando inversiones en el sector minero de otra dimensión”, dijo a través de Red de Comunicación Regional (RCR).
Recordó que una situación similar se vio el 2011 con los precios internacionales de los metales, con la diferencia que teníamos una cartera de proyectos mineros gigantesca de más de 50 mil millones de dólares, muy superior al de este año, que tiene una cartera de inversiones en el sector minero de más de mil millones de dólares.
“La diferencia es abismal y denota los niveles de incertidumbre política que afecta las expectativas en las inversiones. Lamentablemente esto va a terminar afectando ingresos, en los cuales la inflación puede cobrar más relevancia todavía”, indicó.
Destacó que el Gobierno debe entender que, por cada sol de inversión pública, hay cuatro soles de inversión privada. “Lamentablemente las expectativas sobre la confianza en la economía se han deteriorado muchísimo y este es un indicador de lo que va a pasar en la inversión privada. En el IPE estimamos que la inversión privada va a caer el 2022 en un 5% y las estimaciones del BCR y el Ministerio de Economía y Finanzas proyectan un crecimiento nulo”, observó.
“Las condiciones como para que se dé la inversión adecuada, que sustente el crecimiento y genere empleos de calidad no son claras. Definitivamente la incertidumbre política abona en sentido contrario, como otras medidas como el aumento de la remuneración mínima vital que hacen complicado contratar de manera formal. Lo mismo con la eliminación de la tercerización laboral, suena a justicia social, pero revela un desconocimiento de la economía y el funcionamiento de la productividad empresarial”, expresó.
Manifestó que por cada 1% que crece la economía, se generan 70 mil empleos formales. “Eso significa que al no crecer estamos dejando de generar nuevos trabajos formales. Sin embargo, cada año entran a la fuerza laboral más de 100 mil trabajadores nuevos. Eso significa que vamos a tener más población, pero menos trabajos formales y la informalidad va a aumentar. Eso significa que la calidad del mercado laboral se va a deteriorar y eso va a generar bajos salarios y descontento social”, advirtió.
“El nivel de informalidad ha retrocedido 10 años, el nivel de empleo adecuado y los empleos de calidad también han retrocedido una década. Los salarios de los trabajadores también se han reducido a niveles que no veíamos desde el 2009. Ha habido una recuperación de la clase media por el retiro de los fondos de las AFP, pero esto es insostenible en el tiempo y ponen en riesgo a los trabajadores frente al desempleo y en la etapa de la jubilación”, apuntó.
Advirtió que las proyecciones de la inflación se orientan a un cierre al 5% en promedio anual. “Es una inflación que no veíamos hace tiempo, que está explicada por los mayores precios de alimentos y de combustibles. Lamentablemente esto golpea a los sectores más pobres, que gastan mas en alimentos y en transporte, que son rubros que han aumentado más. También esto va a significar un incremento del descontento social”, subrayó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario